Texto: Marco Antonio Rodríguez, Fotografías e información: Ramsés Mercado

Vecinos de San Blas Otzacatipan bloquearon la carretera Toluca-Naucalpan con dirección a la capital del #Edoméx porque temen que el ayuntamiento de Toluca les quite sus tierras, las cuales no cuentan con escrituras o títulos de posesión desde 1978. A este pueblo, ubicado al norte de Toluca, se le forzó a entregar sus tierras para construir el Aeropuerto Internacional de Toluca, es decir, lo despojaron. Sin embargo, le entregaron otros terrenos para que ahí se desarrollara, pero nunca los legitimaron.

En el trienio pasado, el alcalde panista pero postulado por Morena, Juan Rodolfo Sánchez Gómez, ofreció los terrenos de San Blas como “prenda” o depósito para continuar con juicio que acreedores del ayuntamiento entablaron contra el municipio. Lo mismo pasó con el Cosmovitral de Toluca. En este último caso, el ayuntamiento perdió esa propiedad, aunque después se cobijó en las leyes de monumentos y bienes públicos para evitar su entrega. Lo miso pasa en San Blas, pero en este pueblo las tierras, legalmente, no pertenecen a los habitantes, que avizoran que esta nueva administración los abandones y termine por despojarlos para pagar adeudos.

Son cerca de mil quinientos habitantes los que se ven afectados con esta situación que prevalece desde 2019. Ellos han metido oficios, pero eso no ha sido suficiente, pues hasta ahora el gobierno que encabeza el priista Raymundo Martínez Carbajal ha ignorado el asunto.

Como se ha dicho, el problema inició en 1978, cuando sus tierras fueron tomadas por la administración municipal de ese entonces, pues en ese espacio se construiría el Aeropuerto Internacional de Toluca a cargo de la empresa Diseños y Construcciones Hermosa Provincia; no obstante, aquella administración jamás les entregó títulos de propiedad. Hoy el municipio se proclama dueño legítimo de aquellas 8 hectáreas.

Las mismas tierras se encuentran como prenda para subsanar un adeudo millonario con la constructora que estuvo a cargo de la obra de la unidad deportiva de Otzacatipan y que en el trienio de la también priista Martha Hilda González Calderón jamás se liquidó. Por eso, los manifestantes podrían quedarse sin nada.