Brenda Cano: diseño. Ramsés Mercado: imagen e información. Miguel Alvarado: texto.
Toluca, México; 30 de enero de 2023
Colectivos que luchan por la liberación de presos injustamente exigieron nuevamente la liberación de quienes han sido encarcelados violando los debidos procesos, sin pruebas y a partir de falsas declaraciones.
Se trata de la Caravana Mexiquense, que reúne a las organizaciones Haz valer mi libertad, a quienes defienden a la activista guerrerense Kenia Hernández, presa por tomar una caseta, y a luchadores que tratan de liberar a la profesora Leticia Cruz y Mauricio López, de Nicolás Romero, de José Isabel Sánchez, Culhuacán, y al comunero Marciano Galindo, de Huixquilucan.
La unión de los colectivos para conseguir un objetivo común dará más fuerza a los reclamos y a la búsqueda de justicia. En una entidad donde la aplicación de los aparatos de justicia favorece a quienes pueden pagar abogados y procesos que exigen los casos, su unión sienta un precedente. Los que menos recursos tienen están condenados a perder sus juicios casi desde el principio.
Reunidos en punto de las Torres Bicentenario en Toluca, llevaron todos paraguas de distintos colores para simbolizar su batalla, que se ha extendido por años y ha sido llevada a diversos puntos del Estado de México.
La Caravana Mexiquense busca transformar el sistema de justicia en el Estado de México desde la denuncia de la corrupción de los aparatos de procuración e impartición de justicia mexiquense.
Porque “aquí se utiliza la justicia para fines políticos, para perseguir la disidencia, para perseguir a los luchadores sociales. Se utilizan las estructuras oficiales para castigar la pobreza y la diferencia, para castigar lo indígena y lo moreno”, dijeron lo integrantes, que exigieron al gobierno de Alfredo del Mazo y a la Fiscalía estatal la libertad de los presos políticos encerrados en el sistema penitenciario del Estado de México.
Los presos inocentes en la entidad se cuentan por cientos. A ellos se les aplicaron “procesos amañados” en el que la tortura representó uno de los métodos de investigación y confesión.
El colectivo Haz valer mi libertad ha documentado esos casos y junto con el centro de derechos humanos Zeferino Ladrillero, se han dedicado a probar la inocencia de estas personas. El colectivo nació de la necesidad de defender a quienes no pueden pagar un abogado y a quienes las leyes y la justicia no los cobijan. También han impulsado la aplicación de la Ley de Amnistía, la cual permite a algunos presos recuperar su libertad y llevar su proceso en el ámbito domiciliario.
Los integrantes de los colectivos caminaron sobre la avenida Morelos en tanto se dirigían a las instalaciones de la Fiscalía y del gobierno del Estado de México.