Miguel Alvarado
Metepec, México; primero de junio de 2021.
– ¡No ma, así qué chiste!- dijeron usuarios de redes sociales que seguían el debate de aspirantes a alcaldes para Metepec, uno de los dos o tres municipios más ricos del país, pero también el que mayores problemas de corrupción presenta.
Y es que los candidatos principales, la morenista Gabriela Gamboa y el prianista perredista Fernando Flores, que encabezan las preferencias pero también la guerra más sucia de los últimos años en Metepec, decidieron no asistir.
Y así, todo se fue al diablo.
Estos últimos cuatro días los dos se han visto envueltos en escándalos hasta personales que deshielaron los procesos de campaña pero que también terminaron siendo más importantes que las propuestas que intentaron dar a conocer. Ella, en un audio, amenazaba a la familia de Flores y él era balconeado por tres investigaciones de la Unidad de Inteligencia Financiera, pero también por la relación comercial que ha tenido con los gobiernos de Puebla, Querétaro, Edoméx y Metepec, ayudado por políticos afines a Carolina Monroy, una ex alcaldesa cuyo mérito más destacable es ser la prima-hermana del ex presidente Enrique Peña Nieto.
La ausencia de Flores, sin embargo, fue más notoria porque se embarró en el foro después de que se dijera que esa Unida de Inteligencia Financiera había girado orden de aprehensión contra Flores, después de que su caso fuera mencionado en la Mañanera del presidente Andrés Manuel López Obrador. A las 20:35 lo que había comenzado como pura palabrería, ya era tomado por algunos medios como cosa cierta.
“En un debate organizado hoy y en el cual debería de presentarse Fernando Flores, el equipo de campaña y su coordinador Miguel Ángel Ordóñez, decidieron de último momento, no presentarse para no ser aprehendido. Fuentes revelaron que elementos de la Fiscalía General de la República estaban esperando el arribo del empresario para ejecutar la orden en su contra y presentarlo ante la misma institución de justicia”, decía parte de un comunicado que no terminaba de serlo, pero que ya muchos difundían.
Flores diría, por su lado, que su ausencia se trataba de un tema de seguridad y un boletín de su equipo, emitido a destiempo, trataba de cuadrar esa versión porque decía que dos hombres armados habían llegado a un mitin del candidato, en Infonavit San Francisco.
“Cuando integrantes del equipo de campaña intentaron fotografiarlos, estos huyeron. En primer término, se refugiaron en una farmacia de la zona, desde donde seguían hablando por celular y mandando mensajes; al ser encarados en ese lugar, se alejaron de la zona. Flores Fernández pidió a los actores que participan en la contienda dejar de intimidar al equipo de su campaña que, en los últimos días, recibieron mensajes de amenaza de muerte y llamadas intimidantes, además de presencia de personas ajenas al grupo, que toman videos, fotografías y, en muchos de los casos, como el de este martes, portan armas de fuego”. Así, la muerte, así, las elecciones, así la búsqueda del poder.
Carlos Rolando Santiago Vega, de Movimiento Ciudadano, Gustavo Reyes, del Encuentro Social; Guillermo Galeana Peña, candidato independiente; Jaime Israel Trejo Rojas, del Verde Ecologista y Carlos de la Peña, de Redes Sociales Progresistas apenas pudieron hacer del debate una desabrida mesa de propuestas y palabrería, que parecía perderse en los lugares vacíos de Gaby y de Fer, las figuras que hasta en la ausencia pesaron. Así, todos propusieron hacer de aquel municipio un referente cultural, una marca propia, el mejor de todos y en fin, cosas que quienes los escucharon no tomaron en cuenta porque formaron parte de los mismos buenos deseos que se expresan cada año.
La verdad es que muy pocos, a unas horas del cierre de campañas, los reconocen. La disparidad electoral en cuestión de propaganda es evidente. La aplanadora de Morena y los recursos del priismo simplemente arrasaron y dejaron claro que la democracia en México no es cuestión de más capaz, del más inteligente, del mejor académico, sino del más gandalla, del más gritón, del más truculento.
Gamboa, pero no su capacidad democrática; y Flores, pero no su inteligencia, no necesitan de foros en los que se les cuestione. “Por soberbia no están aquí, o porque no tienen proyectos”, dijo De la Peña acerca de Gamboa y de Flores.
Y eso fue todo.
De todas formas, los ganadores del debate fueron Gamboa y Flores, a quienes no les hace falta un debate organizado por el Instituto Electoral del Estado de México. El domingo seis serán las elecciones y hasta ahora ninguno de los dos es claro favorito. Que los metepequenses ayuden a Metepec y que la Unidad de Inteligencia Financiera ayude a Fernando Flores.



