12 febrero, 2025

El narcomapa del Edomex: líderes y cárteles

El narcomapa del Edomex: líderes y cárteles

Ciudad de México; 22 de enero de 2025

Miguel Alvarado

La Familia Michoacana, cártel establecido en el Estado de México, será considerada como una de las organizaciones clasificadas como terroristas, pues se incluye en la denominación de Delincuencia Organizada Transnacional (DOT), lo cual significa que tiene actividades en Estados Unidos o está relacionada con grupos que realizan tráfico de droga, minerales y migrantes a ese país. Esta clasificación será publicada en los primeros días de febrero, luego de que en la toma de protesta del ultraderechista Donaldo Trump como presidente de Estados Unidos, el 20 de enero de este año, se firmara un decreto por el cual se considera a los cárteles un asunto prioritario de seguridad nacional, junto con el tema de los migrantes que quieren ingresar a aquel país, con los que ya viven allá de manera ilegal e incluso con los que han nacido en Estados Unidos pero sus padres son migrantes.

Junto con la Familia Michoacana, están considerados el Cártel de Jalisco Nueva Generación y el Cártel de Sinaloa, entre otros, así como algunas bandas como la MS 13, una falange de las maras salvatruchas salvadoreñas; y el Tren de Aragua, una banda venezolana dedicada a la extorsión, al secuestro, tráfico de migrantes y distribución de droga que se encuentra en diez colonias de la Ciudad de México y se ha expandido por algunas entidades, entre ellas el Estado de México.

El decreto de Trump abre la posibilidad del envío de tropas militares a las regiones en donde se encuentran los cárteles, lo cual supone una intervención armada en nuestro país, esté o no de acuerdo con ello. La Familia Michoacana no ha podido ser desarticulada pese a recientes detenciones de jefes de plaza en el valle de Toluca y a la aplicación del Operativo Enjambre, que ha detenido a funcionarios municipales y alcaldes relacionados con el narco. Sin embargo, a los verdaderos líderes no se les ha tocado y así han consolidado un poder propio que les ha permitido construir un estado dentro del Edomex, cuyo centro se encuentra en el Triángulo de la Brecha, la confluencia geográfica entre tierras mexiquenses, de Guerrero y Michoacán.

El crecimiento de la Familia Michoacana y la llegada de otros cárteles a la entidad ha sido monitoreado por la Fiscalía del Estado de México, que cuenta con información precisa de ubicaciones, movimientos, casas de seguridad y transportes de los líderes narcos, pero no ha podido o querido capturarlos. También tiene mapas en los que se ubican los distintos cárteles y bandas en la entidad.

Por ejemplo, hace cuatro años Ocuilan, uno de los 125 municipios del Estado de México, estaba libre del dominio del narco y del crimen organizado. Al menos eso era lo que mapeaba la Fiscalía de Justicia del Estado de México el 7 de abril de 2020 y lo plasmaba en una cartografía de localización de bandas y cárteles en la entidad elaborado por la Unidad de Análisis Táctico-Operativo (UATO). Era uno de las 57 municipalidades en las que la delincuencia de este tipo no había penetrado, pero sí rodeado y avanzaba de manera sostenida en una zona dominada por la Familia Michoacana, dirigida por los hermanos Jhonny, el Fish; Alfredo, el Fresa y Ubaldo, el Flaco, todos de apellido Hurtado Olascoaga. En paralelo, detenciones de sicarios y secuestradores atestiguan la presencia del Cártel de Jalisco Nueva Generación, como las registradas el 12 de agosto de 2024, cuando se capturó a siete personas con uniformes del Grupo Delta, uno de los brazos armados de aquella agrupación. El Jalisco Nueva Generación se ha desplazado desde el estado de Morelos, donde se afianzó durante la administración del ex futbolista Cuauhtémoc Blanco, que logró ser gobernador de aquella entidad de manera inexplicable. Ocuilan hace frontera con los municipios morelenses de Huitzilac y Cuernavaca. Además, un ex candidato a alcalde de Ocuilan, Luis Ángel Castañeda, fue detenido en Colombia por la Administración de Control de Drogas (DEA) de Estados Unidos, y se cree que podría haber trabajado para el Jalisco Nueva Generación en ese país sudamericano. El 7 de julio de 2024, otros tres delincuentes de ese cártel fueron detenidos en Ocuilan

El 8 de diciembre de 2024, cerca de las dos de la tarde, un coordinador regional del partido Movimiento Ciudadano (MC) fue ejecutado a un costado del palacio municipal, según un relato del periodista local Juan Gabriel González Cruz, quien señala que a Rodrigo Vázquez Campuzano sus asesinos le metieron diez balas y a la camioneta Chevrolet Silverado, gris oscura, en la que iba, la acribillaron completamente. De acuerdo con el periodista, “Ocuilan es, desde hace varios años, una bomba de tiempo que ninguna autoridad federal, estatal y menos municipal, le han prestado atención”, y remarca que aquella región ha tenido problemas de tala “inmoderada” e incursiones del crimen organizado. En realidad, la tala ilegal es un problema de proporciones mayúsculas que ha suscitado enfrentamientos y muertos, pues las actividades en torno a ese delito están controladas por el crimen organizado. El 24 de agosto de este año, talamontes de los poblados de Santa Martha y Santa Lucía se enfrentaron con defensores de San Juan Atzingo, lugar donde se ubican los bosques de Ocuilan, uno de los puntos más conflictivos del municipio.

Rodrigo Vázquez Campuzano, quien también estaba relacionado con el Partido Acción Nacional (PAN), era empresario constructor y había incidido para que MC ganara en Ocuilan la alcaldía, que ocuparía desde el 10 de diciembre. En 2015 fue aspirante a la alcaldía de aquel municipio precisamente por el PAN y ahora se encargaba del protocolo y la ceremonia de toma de protesta del nuevo alcalde, Juan Gordillo. El ramo de la construcción en el sur mexiquense es uno de los más afectados por el pago de derechos de piso y extorsiones, y los dueños de esos negocios y sus empleados son obligados a trabajar en los esquemas montados por los cárteles. El fallecido había participado en el proceso de MC para elección de delegados, que se celebró entre el 1 y el 4 de agosto de 2024, y estaba inscrito por la cabecera federal distrital 35 de Tenancingo, Estado de México.

Esa ejecución pone de manifiesto, una vez más, lo incontrolable que es la violencia en el Estado de México y lo poderosas que son las estructuras de la delincuencia organizada, que sin embargo no podrían actuar como lo hacen ni tener la eficacia que demuestran si no tuvieran la protección de autoridades municipales, estatales y federales; de la Fiscalía mexiquense, de las fuerzas de seguridad pública y de las fuerzas armadas. En la entidad, hasta ese 2020, al menos 68 municipios estaban bajo control de siete cárteles de la droga: la Familia Michoacana, Jalisco Nueva Generación, del Golfo, Sinaloa, la Unión, Nuevo Imperio y del Sur.

Una serie de acciones en contra de funcionarios relacionados con el narco, el Operativo Enjambre, se puso en marcha a mediados de noviembre de este año. Sus resultados han sido diversos, pero los 68 municipios afectados por el narco distan mucho de haber sido limpiados efectivamente. En paralelo, cada detención realizada de un jefe de plaza genera un movimiento en el escalafón del grupo criminal afectado, pero no afecta escalafones ni los debilita, así como tampoco toca la protección que recibe la delincuencia organizada de las estructuras del Estado. Se considera que el Operativo Enjambre no es otra cosa que un plan para cambiar operadores del narco.

Los jefes de plazas en el Estado de México

El Operativo Enjambre es la estrategia reina de la gobernadora del Estado de México, Delfina Gómez, cuya administración ha sido exhibida recurrentemente por el crimen organizado. Si bien el Operativo está enfocado en la captura de funcionarios relacionados con el narco y con delitos de alto impacto, como preámbulo a éste se ha detenido a jefes de plaza del valle de Toluca y a bandas criminales en la Zona Metropolitana del Valle de México, pero no se ha logrado la detención de los líderes de la Familia Michoacana ni de los otros seis cárteles que oficialmente operan en el Estado de México. De acuerdo con la Unidad de Análisis Táctico Operativo de la Fiscalía del Edoméx, hasta el 2023 esos líderes son los siguientes:

Familia Michoacana:

  1. Jhonny Hurtado Olascoaga.
  2. Alfredo Hurtado Olascoaga.
  3. Ubaldo Hurtado Olascoaga.
  4. Josué Ramírez Carrera.

Cártel de Jalisco Nueva Generación:

  1. René Normado González Torres, alias Viejón. Es jefe de las células de Chalco, Ixtapaluca y Los Reyes La Paz.
  2. Kevin Guzmán, jefe de célula en Ecatepec.
  3. Raúl Alfonso González Martínez, alias Jalisco, jefe de plaza de Toluca.
  4. Un sicario de apodo Patrón, que opera desde Guadalajara en Chapa de Mota y Jilotepec;
  5. Benjamín Becerril Sánchez, con base en Ixtlahuaca.
  6. Renato Vilchis, operando en Ixtlahuaca.
  7. Jorge Luis González Aranda, alias Vallarta, detenido, con operaciones en Texcoco.

La Fiscalía del Estado de México mantiene un apartado en donde enlista a los “líderes históricos del CJNG en la entidad, que son los siguientes:

  1. Un sicario apodado Verrugas, jefe regional del Estado de México
  2. Sergio Gómez, alias Checo.
  3. Óscar, alias El de la O, encargado de la plaza en Tultitlan, Tlalnepantla, Atizapán de Zaragoza y Villa Nicolás Romero.
  4. Giovani Domínguez Córdova, jefe de las plazas de Melchor Ocampo, Tultitlan, Tultepec, Zumpango, Nextlalpan y Coyotepec.
  5. Jonathan Atexcatenco Ramírez, alias Yuca, detenido en 2020 y jefe de las subplazas criminales de Tecámac (delegación Héroes Tecámac, San Pedro Atzompa, Ozumbilla, San Martin Ascatepec, San Pedro Pozohuacan) y Tequixquiac.
  6. Alam Ediel Romero Recillas, alias el Flaco o Choques, jefe de la subplaza de Cuautitlán Izcalli.

Además, en la zona sur mexiquense, la Fiscalía ha identificado a los siguientes jefes del mismo Cártel de Jalisco Nueva Generación:

  1. Roberto Carlos González García, alias Leches, que ha sido detenido anteriormente.
  2. Saúl Sánchez Díaz, alias el Cuatro, Cuatlo o Turbo, detenido en diversas ocasiones, que opera en los municipios de Ixtapan de la Sal y Tonatico. Se le atribuye una alianza con Norma Santana Santamaría, líder de una banda independiente integrada por Eraclio Santana, Losé Alberto Lionso Miguel, Elid de Jesús y Francisco Javier que se dedican a la distribución y venta de droga, robo de vehículos, extorsión a lotes de autos en Metepec, Toluca y Zinacantepec. Esta banda representa un punto de contacto con la Familia Michoacana, con la que mantiene nexos.
  3. Un sicario conocido como Hormiga, ex integrante de la Familia Michoacana.
  4. Un sicario apodado Muletas, que trabaja en Sultepec.

En lo que respecta al Cártel del Golfo, la Fiscalía le atribuyó presencia en al menos cuatro municipios, hace un año, e identificó que estaba dedicado a la venta y distribución de droga, robo de vehículos y extorsiones. Las autoridades creen que la base del Golfo se encuentra en la Ciudad de México y se encontraba en un proceso de afianzamiento en municipios como Zumpango, Tecámac, Acolman, Ecatepec y Texcoco. Ubica a José Roberto Díaz Cornelio, alias Comandante Pepe, como uno de los líderes, aunque éste se encontraba en Cancún, Quintana Roo.

Por otra parte, en el Cártel de Sinaloa se dedica en el Estado de México a la distribución de droga, extorsión a rutas del transporte público, y a la elaboración y distribución de armas. La presencia de los de Sinaloa está relacionada con la captación de bandas y de grupos independientes con los que mantiene una relación con miras a que trabajen para el cártel. Sus líderes visibles son los siguientes:

  1. Francisco Javier Recillas Ríos, alias el Víbora, que ya había sido detenido el 18 de mayo de 2015 y actualmente sigue preso. Es jefe de una célula en Naucalpan y Cuautitlán Izcalli.
  2. Carlos Alessandro Ricardo Barocio, alias Ricalde, detenido el 7 de octubre de 2014, fue ejecutado el 24 de marzo de 2020. Se trata de un ex integrante del cártel de los Beltrán Leyva y fue llevado al Sinaloa por Francisco Javier Recillas. Mantuvo presencia en Naucalpan y Huixquilucan.
  3. Mauricio, alias Hamburguesa, el 50, ejecutado junto con el 51 el 22 de junio de 2017, por el sicario Néstor, alias el 20, del cártel del Nuevo Imperio.
  4. Orlando Alonso Molina, alias Pamela, fue detenido el 10/09/2018), dedicado a la venta y distribución de droga en Naucalpan. El cártel de Sinaloa opera en Huixquilucan, Naucalpan, Atizapán de Zaragoza, Tlalnepantla, Tultitlán, Cuautitlán Izcalli, Chicoloapan.

El cártel de La Unión es otro de los que tiene presencia en el Estado de México. Vende droga y la distribuye, realiza extorsiones, opera trata de personas, ejecutan secuestros y homicidios bajo contrato y se encuentran en confrontación con el grupo Fuerza Anti Unión. Este cártel tiene presencia en Huixquilucan, Jilotzingo, Naucalpan, Cuautitlán Izcalli, Nicolás Romero, Atizapán y Teoloyucan. Sus principales jefes son:

  1. Roberto Moyado Esparza, alias Betito. Fue detenido el 8 de agosto de 2018, pero desde prisión controla a la organización.
  2. Pedro Ramírez Pérez, alias el Jamón, detenido el 29 de mayo de 2019.
  3. Un sicario apodado Rachif Castro, que fue mano derecha del Betito.

El cártel del Nuevo Imperio vende y distribuye armas y drogas y se dedica a asesinar. Tiene alianzas con líderes de bandas como Saúl García García, alias el Chupado, del cártel del Nuevo Imperio en Naucalpan. Además, el grupo opera en los municipios de Huixquilucan, Jilotzingo, Naucalpan, Atizapán, Tlalnepantla, Nicolás Romero, Cuautitlán Izcalli y Teoloyucan. Algunos de sus líderes son:

  1. Néstor, alias el 20, ex integrante del cártel de Sinaloa.
  2. Un sicario de apodo Ocof, encargado del huachicol en Naucalpan.
  3. Hugo Abraham Arellano Garibay, alias el JJ, líder de célula en los municipios de Atizapán de Zaragoza, Cuautitlán Izcalli, Tlalnepantla y Nicolás Romero.
  4. Un sicario apodado Comandante 7, jefe de una célula de sicarios.
  5. Carlos Reyes, alias el Gordo, encargado de la venta, distribución y cobro de droga en Naucalpan y Huixquilucan; encargado de reclutar a los vendedores de droga.
  6. Un sicario de apodo Popeye, encargado de la venta y distribución de droga en colonias de Naucalpan.
  7. Un sicario de apodo Harry, encargado de la venta y distribución de droga en Zacamulpa, Huixquilucan.
  8. Un sicario de apodo Moreno, encargado de la venta y distribución de droga en Dos Ríos, Huixquilucan.

Por último, aparece el cártel del Sur, metido en extorsiones, distribución de mercancía ilegal, distribución de cocaína y piedra. De acuerdo con la Fiscalía, llegó del estado de Guerrero gracias a Isaac Navarrete Celis, alias el Señor de la I, líder del cartel, y opera, entre otros puntos, en el aeropuerto de la Ciudad de México. “Existe una presunta alianza con otras estructuras criminales que operan en el municipio, entre ellos la Familia Michoacana y bandas independientes”, dicen las autoridades. Mantiene presencia en Neza, Chimalhuacán, La Paz y Chicoloapan. Su líder es:

  1. Luis Humberto Nava Flores, alias Gigant, que opera en Neza con integrantes de su propia familia.

Todo paga extorsión

El 8 de diciembre de 2024 se cumplió un año del enfrentamiento en el que la comunidad de Texcapilla, ubicado en el municipio de Texcaltitlán, convertida en tierra narca por la Familia Michoacana, echó a los sicarios del Payaso, un sicario de aquel cártel que cobraba extorsiones a los campesinos locales. No sólo los corrió, sino que pudo matar a diez de ellos, en un combate cuerpo a cuerpo filmando por pobladores en los que se dio cuenta de esos hechos. El Payaso, alias de Rigoberto de la Sancha o Juan Carlos Garduño Martínez, había llegado al pueblo a cobrar el habitual pago, que los habitantes estaban dispuestos a darle sin chistar. Pero al narcotraficante se le ocurrió que era buena idea aumentar las cuotas y eso fue suficiente para que Texcapilla se levantara. Ahí en el campo y en los alrededores quedaron los cuerpos de diez criminales, que por su parte lograron asesinar a cuatro habitantes en esa lucha feroz. Un año más tarde, los sobrevivientes rindieron homenaje a sus libertadores, Noé Olivares Alpízar, Jorge Rojas Calixto, Emigdio Esquivel Escobar y Rodolfo Rojas Calixto, a quienes les hicieron una placa y celebraron en su honor una misa. Libre el pueblo del Payaso y sus sicarios, el miedo sin embargo no ha podido ser erradicado. Muchos de los habitantes se fueron para no volver y de al menos ocho de ellos no se sabe su paradero. Otros van de vez en cuando pues no se sienten seguros a pesar de la presencia permanente de la policía, de la que dicen que algún día se irá y entonces regresarán los narcos a tomar venganza. El gobierno morenista de Delfina Gómez asegura que no será así, y aunque la gente de pueblo reconoce su apoyo, desconfía de sus promesas de seguridad. Pobladores de Texcapilla refieren que el suyo es apenas una de miles de comunidades que padecen el asedio y la extorsión de la Familia Michoacana y de otros cárteles que les cobran derechos de piso e impuestos a sus productos y servicios. Eso, que no ha podido o no han querido detener el gobierno federal y el estatal es parte de la respuesta al por qué los productos del campo son tan caros al llegar a los distintos centros de distribución y mercados. Y también responde al por qué los ciudadanos no prosperen, y ayuda a entender que los cárteles y las bandas tengan recursos económicos comparables a los de una gran empresa.

-El problema no solamente está en Texcapilla y aquí, en los municipios colindantes los grupos armados andan como en su casa. Mientras no se desarme a los grupos los problemas van a seguir existiendo, no solamente en Texcapilla. Aquí en el sur del Estado de México cada municipio tiene su líder de grupos armados, y a ésos [el gobierno] no los desarma. Qué bueno lo de Texcapilla, pero el Estado de México no es sólo Texcapilla – dice el párroco de esa comunidad, en una entrevista realizada por la periodista local Ximena García, a quien le señala que el problema de los sicariatos excede las posibilidades del gobierno estatal y por eso la Federación debe intervenir para detener la inmensa extorsión de la que son víctimas estos pueblos, que deben pedir permiso hasta para hacer sus fiestas patronales porque los sicarios cobran hasta por las tortillas, pues en esa región un kilo cuesta 27 pesos porque hay que pagar la extorsión.

No sólo es Texcapilla. Ahora mismo en municipios como Tenango y Tenancingo no se puede comprar el maíz ni otros insumos básicos si no es con quien la Familia Michoacana ordena. Y esa extorsión implica cigarros, dulces, pan, leche, pescado, carnes rojas, flores, hierbas, maderas y material de construcción. Además, los campesinos deben pagar un peso por cada metro cuadrado que posean, anualmente. Esto quiere decir que por cada hectárea que se tenga, produciendo o no, se deben pagar 10 mil pesos.

-Los halcones están por todas partes. Ese es el sistema que tienen estos grupos armados y los halcones avisan quién sale y quién entra, cuándo viene el ejército o la Guardia Nacional. Así, por ejemplo, en nuestros pueblos va la Guardia Nacional a hacer un rondín, pero con el aviso de los halcones todo mundo se esconde y cuando llega la Guardia no hay nada- dice el sacerdote, que considera que muchos de los funcionarios detenidos en la Operación Enjambre están obligados a hacer lo que los cárteles ordenan, desde los presidentes municipales hasta los delegados en las comunidades y los comisariados ejidales. Eso quiere decir que los funcionarios no son libres para actuar, que como otros observadores, está consciente que apenas se detiene a los de abajo, pero no a los verdaderos jefes.

Un ejemplo de los operativos

El Operativo Enjambre, lejos de causar una buena impresión, se ha convertido en una tragicomedia que ha ocasionado un suicidio, grabado por agentes de la Fiscalía y después colocado en redes sociales; el escape cantinflesco de una persona que tomaba posesión como alcalde cuando llegaron por él y el asesinato de un fiscal en Metepec relacionado con la Familia Michoacana, apenas el 21 de enero de 2025.

El 22 de diciembre de 2024 la Fiscalía detenía a quince personas a las que encuadraba como “integrantes de un entramado criminal con presencia principalmente en el sur de la entidad”. Los siguientes párrafos, escritos por la propia Fiscalía, dan cuenta de los errores que se cometen al intentar detener a los investigados. Los sucesos corresponden a una toma de protesta en el municipio sureño de Santo Tomás de los Plátanos, territorio de la Familia Michoacana, y de manera inocente dan fe del poder del narco y la cooptación de las instancias de seguridad pública en municipios como estos.

“María del Rosario “N”, presidenta Municipal del periodo 2022-2024 en el municipio de Santo Tomás de los Plátanos y Pedro Luis “N”, alias “Wicho”, electo para el de 2025-2027 y quien en su momento también fuera presidente del DIF de Santo Tomás, mantenían nexos con la Familia Michoacana y utilizaban recursos públicos para financiar actividades ilícitas. Ordenaba a elementos de la policía municipal brindar protección e informar las actividades de las fuerzas de seguridad federales y estatales.

”Estas dos personas facilitaban datos personales contenidos en los archivos del ayuntamiento, como registros catastrales y padrones de programas sociales, para que el grupo criminal realizara actos de intimidación y extorsiones en agravio de los habitantes de la demarcación, esto incluso les permitió conocer cuántos de sus familiares se encuentran en el extranjero para imponer una cuota periódica sobre el monto de las remesas que reciben.

”En 2021, “Wicho” habría secuestrado al familiar de una candidata opositora a la presidenta municipal para luego exigirle “bajarse de la elección” y amenazarla con causarle daño para que María del Rosario “N”, ganara la contienda electoral.

”Por otra parte, también son investigados actos de extorsión complementarios pues María del Rosario aplicaba reducciones salariales a quienes no aprobaran los puntos de acuerdo que ella proponía al Cabildo, además de que la presencia de individuos armados no uniformados dentro de las oficinas del ayuntamiento era constante, al igual que en las reuniones de los integrantes del Cabildo en lugares que el grupo criminal ordenaba y en donde los citaban para “leerles la cartilla”.

”El sábado 14 de diciembre de 2024, el Cabildo llevaría a cabo la Sesión para la Toma de Protesta como alcalde de este último, motivo por el cual fueron desplegados elementos de esta Institución, junto con integrantes de la Marina, pero al percatarse de su presencia se suspendió el acto. Días después, la tarde del lunes 16 de diciembre, se divulgó a través de redes sociales y aplicaciones de mensajería instantánea una convocatoria a la “Toma de Protesta de Wicho en el Jardín Colgante”, la cual tendría verificativo el martes 17 de diciembre a las 8 horas.

”Ahí acudió la Fiscalía mexiquense, la Defensa, la Guardia Nacional y agentes de la Secretaría de Seguridad, que activaron un despliegue emergente, que tendría dos funciones principales. La primera, que un reducido grupo de agentes de Investigación, que no portaría armamento dada la naturaleza del acto, sería infiltrado de manera encubierta entre la multitud para aproximarse a los dos investigados y extraerlos en caso de que se presentaran.

”La segunda función implicaba que un grupo uniformado y con mayor poder de disuasión, realizaría actos de acompañamiento y de contención para lograr la detención y extracción de quien fuera aprehendido, así como de los propios elementos que componían ambos grupos.

”El grupo encubierto logró ingresar sin ser detectados y posicionarse. Sin embargo, la incursión del segundo convoy fue obstaculizado, toda vez que únicamente existe un camino de entrada para acceder a la cabecera municipal de Santo Tomás, el cual también es utilizado como salida, por lo que individuos que actuaron como “halcones” detectaron la presencia de elementos de seguridad federales y estatales y monitorearon su trayecto desde espacios abiertos y con el uso de drones, por lo que obstruyeron su paso atravesando pipas de agua en su camino.

”Asimismo, una vez que la célula operativa fue retenida, un grupo de personas, entre los que se observaron servidores públicos municipales y otros individuos, muchos de ellos ajenos a este municipio, comenzaron e increpar a los elementos oficiales. De manera notoria, diversas femeninas agredieron a los elementos lanzándoles piedras y gritándoles “¡a ver pégame o dispárame hijo de…!”, mientras los grababan con dispositivos móviles, por lo que la columna de las fuerzas de seguridad no intentó avanzar para evitar una confrontación.

”Si bien la acción conjunta de las células operativas tenía como propósito asegurar a los objetivos previo al acto de toma de protesta y en el momento mismo que se visualizaran, al percatarse el grupo inicial de la ausencia del apoyo interinstitucional, decidieron actuar ante la presencia de uno de los investigados en ese lugar y procedieron a su captura, acción que se llevó a cabo durante el desarrollo del acto con los resultados ya conocidos.

”Al momento en que los policías de Investigación vestidos de civil y desarmados procedieron a ejecutar la orden de aprehensión en contra de Pedro Luis “N” alias “Wicho”, fueron directamente agredidos por varias personas, entre las que se encontraban policías municipales no uniformados, así como integrantes del Cabildo en funciones y entrante, lo que permitió la evasión del investigado. En esta acción, personal de la Fiscalía mexiquense resultó con lesiones policontusas, por lo que recibieron atención médica de emergencia.

”Una vez que las fuerzas de seguridad se retiraran del lugar ante los actos hostiles de pobladores, se tuvo conocimiento que integrantes de un grupo armado se apostaron e ingresaron a la sede del Ayuntamiento donde, según consta en la carpeta de investigación respectiva, Violeta “N”, secretaria de Ayuntamiento, y algunos miembros del Cabildo, obligaron a los demás a reunirse, una vez que estuvieron juntos, ante la presencia y exigencia del grupo criminal los obligaron a firmar el Acta de la Sesión que quedó en inconclusa luego de la intervención de los agentes de Investigación en el Jardín Colgante. Ante ello, los integrantes del grupo criminal les ordenaron culminar el acto que se interrumpió para que, según lo referido por los testigos, “la protesta del Wicho quedara de ley”, además de citarlos para que el 18 de diciembre designaran a María Raquel “N” como presidenta municipal por ministerio de ley.

”Por estos hechos, la Fiscalía mexiquense, en conjunto con Defensa, GN y SSEM, llevaron a cabo diversas acciones operativas los días 17 y 18 de diciembre, en diversos lugares donde fueron detenidos integrantes de este entramado criminal.

”Los detenidos son identificados como: (1) Pedro Luis “N” “N”, (2) María de Jesús “N”, (3) Verónica “N” y (4) Simitria “N” (padre, madre, hermana y sobrina de alias “Wicho”); (5) Vicente Matías “N” (padre de María del Rosario “N”, Presidenta Municipal del periodo actual); (6) Violeta “N” (Secretaria del Ayuntamiento), (7) María Raquel “N” (Primera Regidora) y (8) Luis Ángel “N” (Cuarto Regidor); (9) Seferino “N”, (10) Ángel “N” y (11) Martín “N” (policías municipales); así como (12) Eidy Lorena “N”, (13) Araceli “N”, (14) Litzy Mariana “N” y (15) Nelida “N”. Por estas conductas delictivas, la Fiscalía del Estado de México también obtuvo orden de aprehensión en contra de 11 sujetos más, la cual se encuentran pendiente de cumplimentar.

*

Los operativos han continuado en las últimas semanas. Apenas el 21 de enero, la ejecución del ex fiscal regional de Cuautitlán, Elohim Díaz Jiménez, volvió a poner al narco en el centro de la violencia en el Edomex. Díaz Jiménez estaba en el restorán El Portalito, ubicado en la calle López Mateos de la colonia Lázaro Cárdenas. Ahí llegaron sus atacantes, que bajaron de motocicletas y dispararon contra él y otra persona que los acompañaba.

Los narcomapas elaborados por la Fiscalía dan una idea de cómo el Estado de México tiene una división interna distinta a la establecida políticamente, determinada por la presencia y acciones del crimen organizado.

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