Brenda Cano: diseño. Miguel Alvarado: texto.

Atlacomulco, México; 5 de diciembre de 2023

Tiene techos y toldos rotos, el agua podrida en sus cuatro estanques, los pisos y las banquetas quebradas. Así está el nuevo parque de Atlacomulco que ha costado más de 500 millones de pesos. Le pusieron canchas de futbol, un anfiteatro junto a uno de los lagos y largos corredores que conectan con espacios como el dedicado a la práctica de skate. Su tamaño impresiona, no así su construcción.

Oficialmente se llama Parque Ecológico con Unidad Deportiva Atlacomulco. Se trata de una construcción ubicada en terrenos que pertenecían a los antiguos ranchos de La Querencia y Las Mercedes, muy cerca del caudaloso y contaminado río Lerma, y que se dedicaba a la siembra de avena. Está sobre un libramiento que lleva el nombre de un ex gobernador, Jorge Jiménez Cantú y la avenida Primero de Mayo. y fue prometido por Enrique Peña cuando hacía la campaña que lo llevó a la presidencia de México. Se trata de la promesa 173 de las 266 que hizo entonces y todavía aparece en la página web epn.mx, en donde están los compromisos que realizó en el país y en el Estado de México. Aunque no se ha entregado y ha permanecido cerrado hasta el 5 de enero de 2023, ese Parque Ecológico está marcado con el estatus de “cumplido” y se afirma además que ha beneficiado a 93 mil 718 personas. No es el único caso, pero sí uno de los que se presentan ya como insostenibles en la entidad. El cumplimiento de las promesas de Peña implicó la utilización de más de 400 mil millones de pesos, de acuerdo al Plan Nacional de Infraestructura del propio ex presidente de México.

El gobierno mexiquense ha pospuesto su inauguración varias veces. Primero se determinó que en 2016 estaría funcionando, aunque luego se dijo que sería en junio de 2017. Otra fecha de entrega aparece en el Libro Blanco que describe el Programa Nacional Forestal de la Comisión Nacional Forestal, y que decía que el parque de Atlacomulco era construido con recursos estatales, que se habían invertido hasta 2017 unos 327 millones de pesos y que estaría concluido el 30 de octubre de 2018. La última cancelación sucedió apenas, el 15 de diciembre de 2022.

El parque es más que una construcción aplazada y en mal estado. Se trata de un lugar que el Grupo Atlacomulco intentó construir como un símbolo de ellos mismos. Ahora, un anuncio discreto del gobierno estatal señala que será inaugurado este 6 de enero, pese a las evidentes malas condiciones en las que se encuentra, y que su costo total no ha podido reparar. Y es que por ese parque los gobiernos de Eruviel Ávila y de Alfredo del Mazo ha pagado más de 500 millones de pesos, una cantidad que duplica el costo, por ejemplo, del Parque Fundadores, construido recientemente en Toluca y que hasta planetario tiene. Este espacio costó oficialmente 350 millones de pesos.

Un seguimiento desde Atlacomulco

“Una piedra en el zapato” de Alfredo del Mazo es el parque de Atlacomulco, consideran los periodistas locales Juan Leyva y Mario Velasco, quienes han seguido la construcción de ese lugar desde que lo anunció Peña Nieto. De acuerdo con ellos y con datos de Transparencia que recabaron, el gobierno estatal declaraba que se terminaría el 30 de julio de 2016. Después, descubrieron que la fecha de término se había cambiado para el 31 de octubre de 2018. En el transcurso encontraron un dato importante, que revelaba los costos finales.

Se trata de un dictamen de la Secretaría del Medio Ambiente del Estado de México, que fue entregado a los reporteros y a la revista local d’interés. Ese dictamen indica que el costo final es de 246 millones 470 mil 952 pesos. Pero en ese mismo documento señala que, en realidad, el precio final es de 500 millones de pesos. “No existe una explicación [que justifique] la diferencia de 253 millones 529 mil 47 pesos”, apuntan los periodistas.

Los constructores del parque

Ubicado al norte, Atlacomulco es uno de los municipios más emblemáticos del Edoméx, porque se trata de la cuna de casi todos los políticos encumbrados en la entidad. Aquí vivía la familia del ex presidente de México, Enrique Peña y es terruño del propio Alfredo del Mazo, un hijo y nieto de gobernadores mexiquenses con el mismo nombre. Quienes forman parte de su clan viven en una colonia exclusiva para ellos. El municipio es sede simbólica y física del Grupo Atlacomulco, que aglutina a empresarios como los Hank y a políticos como los Peña, los Monroy, los Del Mazo y otros que han levantado con los años un imperio poderoso que hoy está a punto de quedarse sin su principal activo, el Poder Ejecutivo, pues Morena, el partido del presidente Andrés Manuel López Obrador, aventaja hasta ahora al PRI en las encuestas para la elección de gobernador, que se celebrará este 2023.

El parque fue diseñado por Omaris Zúñia e Iñaki Echeverría, quienes precisan que el complejo ocupa 191 mil 693.572 metros cuadrados y que “alberga áreas abiertas de esparcimiento como plazas, ramblas, áreas para picnic, convivencia para perros, areneros, miradores y foro al aire libre; equipamiento deportivo, zona de juegos infantiles, cuerpos de agua, vías para la movilidad, edificio de usos múltiples y administrativo”.

El arquitecto que trabajó para el proyecto del ex presidente Peña Nieto ahora lo hace para el gobierno de la 4T de Andrés Manuel López Obrador, a quien en 2018 le presentó el proyecto Parque Ecológico Lago de Texcoco para construir una zona de restauración ecológica en los terrenos del cancelado aeropuerto que la administración de Peña haría en el ex Lago de Texcoco. En ese proyecto participa también el gobierno del Estado de México. En 2019, Iñaki Echeverría fue colocado al frente por el gobierno federal del plan de recuperación integral del Lago de Texcoco.

Es un arquitecto de grandes obras. Diseñó y rehabilitó el parque Hidalgo de Coatzacoalcos, un proyecto de 75 millones de pesos. Se trata de un prestigioso profesional egresado de la UNAM que además es miembro del Consejo de Expertos del Consejo Asesor de Desarrollo Urbano Sustentable (CONDUSE), un grupo de expertos que aportan al desarrollo urbano.

Fue el estudio de Iñaki el que diseñó ese parque, pero la empresa que lo construyó fue Launak, SA de CV, una compañía favorecida profusamente con contratos por el gobierno de Eruviel Ávila. Por ejemplo, construyó el parque Morelos y el Auditorio Metropolitano, en Ecatepec y “espacios públicos de la unidad habitacional CTM XIV y el Puente Acueducto II-Tulpetlac, en Ecatepec. También la construcción de carriles confinados para la Línea 4 del Mexibús y obras complementarias en Tlalnepantla, Ecatepec, Tecámac, además de múltiples obras de pavimentación y bacheo en una decena de municipios, entre ellos la capital, Toluca. Pero la joya en su corona es la magna obra que Enrique Peña Nieto prometió para Atlacomulco: el Parque Ecológico con Unidad Deportiva, aún inconcluso, y en el que se han invertido millones”, señala la periodista Ana Lilia Pérez en un reportaje para Newsweek en 2017.

De Launak son socias Barbra Kferman Alonso y Magdalena Alonso Salas. Kferman está relacionada con el propio ex gobernador Eruviel Ávila y con familias que poseen constructoras en el valle de México, sobre todo en Tlalnepantla y Atizapán, y que han intentado entrar a la política por el PRI y el Verde Ecologista en gobiernos municipales de aquella región. Es pariente de Omar Edgard Kferman Alonso, quien en mayo de 2022 participó en la licitación del distribuidor vial de aeropuerto de Cancún con su empresa, Kaltec. Esta misma empresa en 2019 construyó en Toluca un colector de drenaje en la calle de Manuel Buendía, con un costo de hasta 6 millones de pesos., pero sus contratos suman decenas.