Ramsés Mercado: imagen. Miguel Alvarado: texto.
Huixquilucan, México; 13 de enero de 2023
Fue detenido en diciembre de 2022 porque, junto con otros ejidatarios, ha defendido en Huixquilucan -un municipio que gobernó como alcalde Alfredo del Mazo Maza- los bosques de agua de la región, así como la tierra propiedad de los pueblos originarios.
A Marciano Galindo Ramírez lo apresaron por eso. Era comisario ejidal en aquel municipio y su oposición a las fraccionadoras y constructoras lo tiene en la cárcel. A pesar de que sus compañeros han tratado de sacarlo, hasta ahora no lo han conseguido. Hoy, una movilización de comuneros, apoyados por las organizaciones Haz valer mi libertad y Caravana Mexiquense, dedicadas a la obtención de la libertad de presos injustamente, cerró un sentido de la autopista Toluca-México por unas horas, hasta que un acuerdo con integrantes de la Guardia Nacional pudo liberar el paso.
Galindo Ramírez es integrante de los Bienes Comunales de Huixquilucan y fue detenido porque lo acusaron de portar un arma, y aunque salió en libertad, dos días después fue imputado nuevamente, ahora por extorsión, y desde entonces pesa sobre él un proceso penal generado por las fraccionadoras, de acuerdo a sus compañeros.
“El presidente del Comisariado de Bienes Comunales de Huixquilucan fue privado de su libertad por unos supuestos ministeriales, con armas largas que portaron en las oficinas de Bienes Comunales, sin presentar documentación alguna y sin identificarse con ninguna credencial. Al comisariado se lo llevaron, actualmente realizaba juicios para recuperar predios invadidos por fraccionadores ilegales y talamontes que son solapados por las autoridades”, dijo Sergio González Núñez, compañero de Marciano, cita una nota del reportero Eulalio Victoria. Los comuneros han promovido juicios para recuperar predios y terrenos que los fraccionadores les quitaron. La lucha de Galindo Ramírez ha tocado intereses de desarrolladores habitacionales de lujo y de dueños de centros comerciales, que hace años han invadido el corredor de bosques de agua de Huixquilucan, Jilotzingo, Lerma y Santa Fe, entre otras demarcaciones. Esto, en detrimento de la propiedad ejidal y por consiguiente de los ecosistemas de cada región. La implementación de un frente común en defensa de estos territorios no ha conseguido detener a los invasores y sí en cambio ha generado una persecución enconada contra quienes se defienden.