Redacción VcV
Toluca, México; 11 de octubre de 2021.
A casi un millón de pesos asciende el monto que la directora Luz Adriana Ortiz, de la secundaria Rosario Castellanos, ubicada en Metepec, ha usado de manera arbitraria, sin justificación, y tratando de utilizar facturas y documentación falsa para tratar comprobar gastos. También, ha tratado de hacer pasar equipo escolar antiguo como nuevo. Esto, además de denuncias por maltrato y acoso laboral han sido exhibidas por trabajadores de la escuela, quienes hoy lunes se presentaron a trabajar bajo protesta, porque elevaron una denuncia ante las autoridades correspondientes el 23 de septiembre, y desde entonces no obtienen ningún tipo de respuesta.
Entre otras cosas, acusan a la directora de imponer a Juan Carlos García Huitrón como presidente de la Asociación de Padres de Familia, pero sobre todo del manejo irregular del presupuesto asignado por la SEP para la institución, una suma que alcanzaba el medio millón de pesos, así como la cooperación por alumno para inscripción, con valor de 350 pesos, lo cual dio un total de 245 mil pesos; la cuota para contratar servicios de internet, que juntó 70 mil pesos y el producto de la renta de la tienda papelera escolar y de la cafetería.
Los trabajadores indican que a cada uno de los 700 alumnos se les cobraron 100 pesos para obtener el servicio de internet, a mediados de este año, pero el servicio no se contrató ni tampoco se explicó para qué se ha usado ese dinero.
Los padres de familia exigen un informe detallado del destino de los recursos económicos de la escuela, así como explicaciones de la directora acerca de los documentos que ha presentado como pruebas de compras y que han resultado falsos o poco claros.
“La directora ha generado un ambiente escolar nocivo, tóxico y estresante para los alumnos, profesores y para la comunidad escolar en general, por su trato prepotente, grosero, abusivo y humillante, que ha [escalado] hasta llegar a agresiones físicas en contra de maestros de la escuela, esta fue la razón de que los más de 50 docentes y trabajadores cerraran la escuela la semana pasada”, señalan los quejosos.
Los maestros, por su lado, denuncian que la directora cambia arbitrariamente las asignaturas de los profesores, a manera de castigo, y les impone clases con contenido que ellos no dominan, lo cual ha repercutido en la calidad de la enseñanza y en el conocimiento de los alumnos. Además amenaza, intimida y descalifica a los trabajadores, a quienes adjudica faltas y retardos de manera arbitraria pata conseguir castigos económicos contra esta plantilla laboral. De acuerdo a los padres, la directora arrastra más de 40 denuncias en su contra ante autoridades de Educación y ante la Comisión Estatal de Derechos Humanos.
La directora, dicen los afectados, ha sido corrida de otros planteles, como la secundaria Hank González, ubicada en Autopan, la Juan Rosas Talavera, ubicada en Tenango y la Agustín Melgar, de Toluca.
En el caso del plantel Rosario Castellanos, los maestros han recibido las visitas de autoridades sindicales y están en espera de una resolución.
“Los docentes hemos sido pacientes, pero no hay respuesta. Pedimos que se resuelva esta situación. No queremos gritos ni insultos. Hemos tenido amenazas en todas las reuniones a las que hemos asistido con la directora. Por eso denunciamos ante la sociedad. Queremos que nos escuchen. Las labores siguen y no queremos afectar a los niños ni a sus familias”, señala la profesora Giselle Mancilla, docente frente a grupo. Así, 55 de las 65 personas que laboran en la escuela han levantado la voz y piden el apoyo de la comunidad para resolver el conflicto.
