Ramsés Mercado: foto e información. Redacción VcV

Toluca, México; 19 de diciembre de 2022

Por fin llegaron los jóvenes futbolistas de Toluca que estaban atrapados en Perú debido a la inestabilidad política y social por la que atraviesa aquel país. Juegan para la Academia Atlante en la capital mexiquense y había acudido a un torneo de futbol, la semana pasada. Pero cuando intentaron regresar, no encontraron disponible su vuelo y debieron esperar una semana en la ciudad de Trujillo, antes de poder embarcar de nuevo hacia Toluca, desde Lima, la capital peruana.

Ellos, un equipo formado por menores de entre 15 y 16 años, habían disputado el Torneo Internacional de Futbol “Copa Primer Poli Ejido” en la ciudad de Guadalupe.

Uno de los futbolistas, Diego Ramírez, señaló al llegar a México que estar en Perú les resultó muy complicado, pero nunca se sintieron amenazados, y por eso el miedo más común para ellos estaba relacionado con la propia estadía, con el tiempo que permanecieron en Sudamérica y con los cambios de fechas de los vuelos.

-Estaba seguro de que mi mamá estaba haciendo todo lo posible para que regresara lo más pronto posible. Hoy solamente estoy cansado pero feliz- dijo el chico, quien llegó bien, sin ningún tipo de daño físico o emocional.

De acuerdo con él, estar encerrados en el hotel en el que estaban retenidos, no fue tan complicado porque estaban todos juntos y todos eran amigos.

Su madre, ahora que tiene al chico con ella, se declaró feliz y tranquila, aunque recordó la angustia por la que las familias pasaron. Los 22 chicos y los seis adultos que componían la delegación mexicana están bien, y luego de las seis horas de vuelo desde Lima, arribaron al aeropuerto internacional de la Ciudad de México, cerca de la una de la tarde.

Y en la puerta de salida los padres y familiares ya esperaban a los futbolistas. La llegada fue emotiva y todos abrazaron y festejaron que la aventura peruana hubiera terminado sin novedad. Los padres agradecieron al club Atlante por todas las gestiones que realizó para traer de vuelta a los chicos, que llegaron a Toluca en una camioneta. Aquí, sus amigos los esperaban con pancartas y globos. “Te queremos crack”, decía una de ellas.

Así, lo más trágico que les pasó es que tuvieron que ver la final del Mundial de Qatar encerrados en el hotel en el que estaban.