Miguel Alvarado

Toluca, México; 19 de agosto de 2022.

Jesús Murillo Karam el procurador federal que se encargó en primera instancia del caso de los 43 desaparecidos de Ayotzinapa, fue detenido esta tarde cuando salía de la su casa, ubicada en la exclusiva zona de Lomas de Chapultepec en la Ciudad de México. Fue acusado de los delitos de desaparición forzada, tortura y contra la administración de justicia. La orden de aprehensión fue otorgada por el juez de Control del Centro de Justicia Penal federal en la Ciudad de México, con sede en el Reclusorio Norte.

Murillo forma parte de una extensa lista de nombres que fueron revelados, de acuerdo al  subsecretario de Derechos Humanos de Gobernación, Alejandro Encinas, por el fugado Tomás Zerón de Lucio, luego de un acuerdo con el gobierno de México que lo obliga a realizar trabajos de delación.

En esa lista destacan el ex gobernador de Guerrero, Ángel Aguirre, el actual secretario de Seguridad de la Ciudad de México, Omar García Harfush, el ex titular de la Unidad Especializada en Materia de Delitos Contra el Secuestro, Gualberto Ramírez Gutiérrez; el almirante Marco Antonio Ortega Siu, ex jefe de la Unidad de Operaciones Especiales de la Marina y el El comandante de la Zona Militar en Chilpancingo, Alejandro Saavedra.

Karam, quien también fue gobernador del estado de Hidalgo, es el autor de la famosa frase de “Ya me cansé”, que pronunció cuando presentó en público la investigación de la extinta Procuraduría General de la República. En esa ocasión desglosó una increíble historia de horror que ubicaba a los 43 normalistas en el basurero de Cocula, muy cerca de Iguala, en Guerrero, la madrugada del 27 de septiembre de 2014.

Allí, dijo el entonces procurador, mientras pasaba diapositivas y videos, así como fragmentos de entrevistas a sicarios de Guerreros Unidos detenidos, los estudiantes habían sido ejecutados e incinerados en una pira gigantesca que duró encendida por lo menos dos días, hasta que se agotó, dejando carbonizados los restos de los chicos.

Esos trozos carbonizados que ahora era, de acuerdo con el procurador, fueron arrojados al cercano río San Juan o de plano se habían perdido. A esta versión del gobierno de Enrique Peña Nieto, quien en ese momento era presidente de México, se le llamó “la verdad histórica” y se quedó como una historia narrada desde la oficialidad de ese gobierno, que se encargó de investigar un hecho que no había existido. Con base en esos sucesos, el gobierno peñista capturó, interrogó y encarceló a decenas de personas a quienes culpó de quemar a los jóvenes o de participar de alguna manera en la pira fantástica. Desde el primer momento, esa versión fue cuestionada por periodistas, que se dedicaron a derribar las historias que Murillo había construido.

La frase del “Ya me cansé” fue dicha por Murillo cuando los periodistas que acudían a escuchar ese informe preguntaron por más de dos horas y el funcionario, de pie todo el tiempo, pues no se atrevió a pedir una silla, comenzó a incomodarse. Murillo pasa a la historia de México por esa frase pero sobre todo porque avaló la versión del incendio de Cocula.

Ahora detenido por la responsabilidad que tiene en la construcción de la primera investigación de los normalistas de la Isidro Burgos, ha sido trasladado a las oficinas de la Fiscalía General de la República.

Apenas ayer se presentó un informe preliminar de las investigaciones de la Cuarta Transformación. En ese informe aparece el nombre de Murillo Karam, pero también el de otros funcionarios que en aquel año de 2014 ocupaban cargos importantes.

La lista completa

En la página 84 del Informe de la Presidencia de la Comisión para la Verdad y Acceso a la Justicia del Caso Ayotzinapa, que fue liberado también, por Alejandro Encinas, subsecretario de Derechos Humanos de la Secretaría de Gobernación hay una lista de personajes que participaron en la elaboración de la Verdad Histórica. Murillo Karam es apenas un componente.

“La verdad histórica es resultado de una acción concertada del aparato organizado del poder” y en ella participaron el procurador general de la república, Jesús Murillo Karam; el subprocurador de la Seido, Rodrigo Archundia; el encargado del Despacho de la SEIDO, Hugo Ruiz; el titular de la Unidad Especializada en Materia de Delitos Contra el Secuestro, Gualberto Ramírez Gutiérrez, y el director de la Agencia de Inteligencia Criminal, Tomás Zerón.

Este último se encuentra en Israel y de acuerdo con el informe, colaboró delatando a superiores como Murillo, pero también a otros funcionarios a cambio de un criterio de oportunidad, es decir, de convertirse en testigo protegido y alcanzar penas menores en caso de ser procesado.

De acuerdo con el informe de Encinas, quienes fungieron como enlaces operativos para la investigación de la verdad histórica son:

1. Por parte de la Marina, el almirante Marco Antonio Ortega Siu, jefe de la Unida de Operaciones Especiales.
2. El titular de la Unidad de Inteligencia Naval, almirante Eduardo Redondeo Arámburo.
3. Por parte del CISEN, José Miguel Espinoza Pérez, delegado en Guerrero.
4. Por la Policía Federal, el comisario Omar García Harfusch y el comisionado nacional de Seguridad, Manelich Castilla. García es actualmente el secretario de Seguridad de la Ciudad de México y fue nombrado por la gobernadora Claudia Sheinbaun, quien lo exculpó de cualquier responsabilidad en los hechos de aquel 2014.
5. El comandante de la Zona Militar en Chilpancingo, Alejandro Saavedra.
6. El policía federal ministerial Carlos Gómez Arrieta.
7. Por parte de Servicios Periciales de la PGR, Sara Mónica Medina.
8. Por parte de Comunicación Social de Presidencia, Eduardo Sánchez.
9. Por parte del Cenapi, Vidal Díaz-Leal Ochoa.
10. Por el gobierno de Guerrero, el gobernador Ángel Aguirre.
11. Eñ procurador general de Justicia de Guerrero, Iñaki Blanco.
12. El secretario de Seguridad Pública, Leonardo Vázquez Pérez.
13. Ernesto Aguirre Gutiérrez, coordinador de Proyectos Estratégicos.
14. El ministerio público federal Jorge García.
15.  La ministerio público federal Blanca Alicia Bernal Castilla.
16. Abraham Eslava Aririzu, titular de Unidad de la Subprocuraduría en Investigación de Delincuencia Organizada.
17. Bernardo Cano Muñoz, director general adjunto del Centro Nacional de Planeación, Análisis e Información para Combate a la Delincuencia.
18. Javier Díaz Serralde, jefe de Agentes de Seguridad de la Policía Federal Ministerial.

Al ex procurador Murillo Karam podrían acusarlo de desaparición forzada o de participar en el encubrimiento de los 49 asesinatos que se registraron esa noche en Iguala. De acuerdo a la propia Fiscalía, esa noche hubo en realidad más de 80 personas ejecutadas.

Más órdenes de aprehensión

Por la noche, a petición de la Fiscalía General de la República (FGR), el juez segundo de Procesos Penales Federales en el Estado de México, con sede en Toluca, libró 83 órdenes de aprehensión contra 20 mandos militares y personal de tropa del 27 y 41 batallones en la ciudad de Iguala, así como contra cinco autoridades administrativas y judiciales del estado de Guerrero; a 26 policías de Huitzuco; seis de Iguala y uno de Cocula; más 11 policía estatales de Guerrero y 14 miembros del grupo criminal Guerreros Unidos.

Todos ellos vinculados con lo ocurrido en la ciudad de Iguala, Guerrero, el 26 y 27 de septiembre de 2014, y fechas posteriores. Los delitos por los que se libraron las órdenes de aprehensión son por delincuencia organizada, desaparición forzada, tortura, homicidio y delitos contra la administración de justicia.

Las imputaciones, en cada caso, se darán a conocer en el proceso penal correspondiente, y el cumplimiento de las órdenes de aprehensión serán también informadas en el momento procesal que la ley autorice.