Toluca, México; 13 de mayo de 2024
Miguel Alvarado: texto/ Ramsés Mercado: información e imágenes
«Nuestros salarios son de 4 mil pesos al mes, si bien nos va. Ahí están nuestros talones de pago que marcan desde 87 pesos. Es una vergüenza».
Nuevamente, trabajadores estatales salieron a las calles de Toluca para protestar por las condiciones laborales que privan en la actual administración de la gobernadora morenista Delfina Gómez. Esta vez, trabajadores suplentes del Instituto de Seguridad Social del Estado de México y Municipios denunciaron que no les han otorgado vacaciones desde hace un año. Además, no tienen base, prestaciones, seguro médico ni un salario digno a pesar de que cuentan con diez años de antigüedad.
Los manifestantes, trabajadores del Hospital Materno-Infantil dijeron que “no tenemos derecho a enfermarnos, no tenemos derecho a nada. Nuestros salarios son de 4 mil pesos al mes, si bien nos va. Ahí están nuestros talones de pago que marcan desde 87 pesos de salario. Es una vergüenza que el gobierno del Estado de México no les pague un salario digno a los profesionales de enfermería, camilleros, médicos, trabajadores sociales, inhaloterapia”, que desde ahora temen algún tipo de represalia por manifestarse. Por eso, todos ellos han salido a las calles con mascarillas, lentes oscuros y sombreros o gorras que les cubren la mitad del rostro.
De acuerdo con ellos, el Hospital Materno-Infantil lleva más de diez años sin procesos de basificación y hay algunos empleados que tienen hasta 15 años sin derechos. Y ese es el reclamo, la basificación del personal de enfermería y de quienes trasladan pacientes en el Materno-Infantil. Los procesos que se han intentado en años anteriores han arrojado una pila de documentos que sirven como constancia de la inacción y desinterés de los gobiernos, tanto del actual como de las anteriores administraciones priistas.
“En el hospital empecé como enfermero general, desde abajo. Hice una licenciatura, una especialidad en enfermería pero eso no sirve de nada en cuestión de sueldos. ¿Cómo es posible que los enfermeros no tengamos el derecho a la salud”, expresa Misael, que se protege el rostro pero habla libremente y revela que el seguro médico que les prestan no siempre tiene validez.
– Ustedes ganan 4 mil pesos al mes…
– Hay cheque de 80 pesos quincenales. Eso es una burla -responde el manifestante.
– ¿Y así han estado laborando?
– Sí. Tenemos familia, hijos. Hay compañeras embarazadas a las que el ISSEMyM les rescindió el contrato para no darles la prestación que por derecho les corresponde- dice Misael entre la gritería de los inconformes, que llevan lonas y pancarta, vestidos de blanco, su diario uniforme de trabajo.
-Hemos metido oficios pero no hay respuesta positiva de las autoridades, sólo nos dicen que esperemos, que esperemos, que esperemos- dice ella desalentada, parada enfrente de la enorme lona que describe las condiciones extremas de su trabajo. La mujer junto a ella dice que tiene once años trabajando sin prestaciones como enfermera y narra la misma historia, antes de marchas al centro de Toluca hacer plantón frente al palacio de Gobierno.
El cierre de calles y la manifestación, dice Citlalli, otra de las afectadas, es para que la ciudadanía se entere de esta situación y que el gobierno tome conciencia. Unas 200 personas son las que viven en ese régimen.